
Disculpen si les pido que interrumpan un momento las habituales cavilaciones en la que todos estamos en este tiempo de clausura, para abrirlas a otros ámbitos u otras personas que tienen unas cavilaciones mucho más graves que las nuestras, ya que su misma vida está en juego ahora mismo
Y no me refiero a las personas de nuestro ambiente infectadas por el coronavirus, muchas de las cuales, desgraciadamente, perderán la vida, sino a otras cuya vida no va a ser truncada por un virus irracional (como son todos los virus, que ni siquiera son «seres vivos»), sino por manos humanas de seres en pleno uso de sus facultades mentales y de su poder de decisión.
Amnistía Internacional nos presenta este asunto sobre uno de los casos en los que levan batallando hace unos meses. Nos piden apoyo para la causa de un chico sudanés de 15 años. ¿Quién es? Nunca sabremos «quién» es. Pero ahí está su foto. La imagen de un ser humano en el comienzo de su vida… a punto de ser truncada.
Es bueno pararse y contemplar ese rostro durante un minuto, en silencio, sin juicios mentales…
Pueden dirigirse a este enlace: Firma.
Es cierto, es sólo «un caso». ¿Y qué es eso frente a los millones de casos sufrientes? Pues mucho. Porque mal podremos interactuar con esos «millones» de casos si no comenzamos por «uno». Gracias.
P. Eduardo Suanzes, msps
Mi confianza está puesta en el Señor y tengo la fe en Él, en que cambiará los corazones de estas personas para salvar su vida! Y darle una oportunidad más.